Andy Warhol, cronista de una época, era conocido por haber admitido que le gustaban “las cosas aburridas”, algo que a comienzos de los años sesenta se relacionaba con la utilización de reproducciones fotográficas de imágenes encontradas en periódicos, revistas y archivos de imágenes. En 1978, cuando contaba 50 años, Warhol se embarcó en la producción de una obra monumental, titulada Sombras (Shadows), que realizó con la ayuda de su entorno en la Factory. Estos 102 lienzos serigrafiados daban forma a exploraciones en torno a la abstracción que había estudiado previamente. Para entender la radicalidad que implican las Sombras de Warhol, es necesario detenerse en primer lugar en el formato de la obra, concebida como una sola pintura en varias partes, cuyo número definitivo queda determinado por las dimensiones del espacio en que se instala. La primera vez que se expuso, se mostraron 83 lienzos, que se colocaron muy cerca del suelo —a unos 30 cm—, muy próximos unos a otros y en el orden decidido por los asistentes del artista.
Andy Warhol, Diarios, vol. 202, col. Panorama de narrativas, Edición de Patt Hacket. Anagrama Editorial S. A., 1990, págs. 266–267
“Fui en taxi a la galería de Heiner Friedrich en el West Broadway (5$). Fred aún no había llegado. Ronnie y Stephen Mueller estaban colgando cuadros. La exposición quedaba muy bien, la galería es muy grande […]”
Martes 23 de enero, 1979
“[…] Cuando llegué a casa, Mrs. de Menil me había llamado y había dejado un mensaje diciendo que le había impresionado mucho mi exposición en la galería de Heiner.”
Andy Warhol, Diarios, vol. 202, col. Panorama de narrativas, Edición de Patt Hacket. Anagrama Editorial S. A., 1990, págs. 268
Jueves 25 de enero, 1979
“Philippa invitó a René Ricard —su Dia Foundation le acaba de contratar para la galas benéficas como primer poeta—, así que él llegó al 65 Irving diciendo que mi obra era “simplemente decorativa”. Eso me puso furioso y fue una vergüenza porque todo el mundo me vio tal como soy yo. Me puse muy colorado y le chillé…. Todo el mundo estaba asombrado de verme tan furioso y fuera de mí, gritándole.”
Donna De Salvo, Andy Warhol Retrospective, cat. expo. Londres, Tate, 2001, págs. 50–51.
“Al ser su autor un artista conocido en esos años por sus obras de personas famosas, y que había explotado con tanto éxito un tipo de contenido provocativo y referencial, Shadowsdebía haberse interpretado como una anomalía. Se ha definido Sombras como una declaración existencial, como todo y nada, como algo fugaz, variable y tan intangible como las sombras reales. También se ha definido como una reflexión en torno al propio acto de pintar. Pero, invariablemente, se ha clasificado como una obra perteneciente a su última etapa, junto con las obras Rorscharchs, Camuflaje (Camouflage) y Oxidación (Oxidation) […] Cada una de las estrategias visuales que se emplea en estas pinturas es igual a aquellas utilizadas diecisiete años antes. Tal y como sucede con las pinturas serigrafiadas anteriores, aunque a primera vista parezca que todos los lienzos son iguales —una creencia enfatizada por el motivo repetitivo de la sombra—, no lo son. Nuestra mirada se mueve de lienzo en lienzo de forma instintiva, buscando nueva información.
La diferencia radica en el color y en la brillantez del trazo, efectuado con la mopa y la técnica serigráfica. Las combinaciones de color y el arco cambiante de la sombra se confabulan para crear un campo fascinante e hipnótico, que transmite una sensación de pura belleza trascendente”.
Julian Schnabel, “Shadow Paintings”, Andy Warhol: Shadow Paintings, cat. expo., Nueva York, Galería Gagosian, 1989
“El modo en que utilizó la pantalla, como si fuera un pincel o una brocha más, es el emblema impreso de su comportamiento. Y su decisión de seleccionar y actuar sin interpretación, sin explicación, fue la negación total del sentimiento. Ningún otro pintor ha llegado a ese nivel de radicalidad gestual y de negación de sí mismo […] Esta pinturas se ciernen sobre nosotros como la sombra del límite de la vida. Estas pinturas son el toque de Andy Warhol, su distancia […] Hay mucho en ellas, todas las imágenes de las obras de Andy atraviesan la luz y la sombra de estas pinturas, que se expresan y reafirman en esta visión del hecho existencial”.